Si bien se podría llegar a incorporar nueva capacidad de transporte en los próximos meses, la mayoría estaría recién cuando termine el invierno.
Las bajas temperaturas de mayo volvieron a demostrar la importancia de ampliar el sistema de gasoductos para dejar de depender de combustibles importados y así generar un fuerte ahorro en divisas y subsidios.
Lamentablemente, la mayoría de las obras que viene desarrollándose hacia ese camino como la Reversión del Gasoducto Norte y las plantas compresoras del GPNK sufrieron un gran retraso y no estarían listas para este invierno.
“Hubo inconvenientes con la importación de insumos esenciales el año pasado, tanto por las restricciones que había y porque, desde la guerra en Ucrania, se disparó la demanda de algunos elementos vinculados a gasoductos y no se consiguen. También hubo algunos incumplimientos en Salliqueló por parte del contratista”, destacó una fuente oficial a este medio, respecto al motivo por el cual las plantas compresoras no se inauguraron a fines del año pasado como estaba previsto.
De esta manera, la planta de Tratayen recién podría estar en marcha entre fines de junio y principios de julio, mientras que la de Salliqueló estaría lista entre septiembre y octubre. Cada una, permitirá una inyección extra de gas por unos 5 millones de metros cúbicos día que, al igual que sucedió con los 11 MMm3/d del primer tramo del GPNK, se destinarían al reemplazo de combustibles líquidos para la generación eléctrica.
Cómo avanza la reversión del Gasoducto Norte
Por el lado del Gasoducto Norte, una obra que se retrasó principalmente por el cambio de Gobierno, la necesidad de volver a licitar algunos tramos por falta de ofertas que se adecuen a los pliegos y las dudas de la gestión Milei en darle continuidad o no, las fuentes consultadas anticipan que en agosto podríamos tener novedades.
La obra de reversión del Gasoducto Norte continúa avanzando con la soldadura de los nuevos caños.
“Está funcionando muy bien la obra, sobre todo los primeros 100 km del nuevo caño que ya se están soldando. El tramo de Techint-Sacde, al ser el que primero empezó, está más avanzado. Posse, el Jefe de Gabinete, dijo que esta parte estaría lista el 31 de agosto en su informe al Senado y que la reversión de plantas compresoras en 2025. Pero primero se pueden operar manualmente, lo que lleva más tiempo es la automatización”, indicó otra fuente al tanto de los trabajos. “De nuestra parte venimos trabajando en tiempo y forma, incluso adelantados”, comentaron desde una contratista.
El total de la reversión implicaría poder transportar unos 19 MMm3/d en sentido sur-norte. No obstante, TGN fue realizando algunas obras en los últimos años que ya permiten llevar 10 MMm3/d en esa dirección y, si se termina el caño La Carlota-Tío Pujio en agosto como esta contemplado, se podrían transportar unos 5 MMm3/d adicionales gracias a otras obras que la transportista está desarrollando en dos plantas compresoras.
“Hoy se suben 10 MMm3/d, en agosto se subirían 15 MMm3/d y en marzo del 2025, cuando estén listas todas las plantas, vamos a poder subir los 19 MMm3/d totales”, clarificó un especialista del sector.
Reemplazar el gas de Bolivia
En este caso, el total de la capacidad se utilizaría para reemplazar la importación de gas boliviano que hoy promedia los 5 MMm3/d, dejando un mínimo excedente. “En el norte la demanda de invierno son 22 MMm3/d que la cubrís con estos 19 MMm3/d más 3 MMm3/d que producen las cuencas de Salta. En cambio, la demanda de verano va de 13 a 16 MMm3/d, ahí te puede quedar un remanente para exportar a Chile”, subrayan desde una empresa con amplia experiencia en el mercado gasífero de esta región.
Hacia un futuro algo más lejano, todavía queda la definición por el segundo tramo del GPNK hasta San Jerónimo y una segunda etapa de la Reversión del Gasoducto Norte dedicada en un 100% al mercado de exportación.
“Por el GPNK hay una licitación que se fue postergando y la última postergación quedó sin fecha definida. Ya Massa había planteado que tenía que construirse con financiamiento privado y este Gobierno piensa lo mismo. Por el momento, la ingeniería hecha y también la licitación de los caños. Habría que ver qué pasa con los proyectos hacia Brasil”, destacó otra fuente.
En definitiva, como estas obras están destinadas principalmente a la exportación al país vecino, su suerte estará dada por el acuerdo que se realice con las autoridades brasileñas. El segundo tramo del GPNK, con sus casi 20 MMm3/d adicionales, tendría como lógica continuidad un nuevo caño hasta Porto Alegre.
En tanto, la segunda etapa de la Reversión del Gasoducto Norte, con otros 10 MMm3/d nuevos, recién podría encararse si se logra una exitosa negociación con Bolivia para usar el gasoducto que conecta este país con la ciudad de San Pablo.