Después de un fin de semana agobiante, la ola de calor se extiende un poco más aunque anticipa la disminución de las máximas. Alerta amarilla por tormentas para la zona este de Río Negro.

El calor agobiante y la humedad continúan afectado a Río Negro y Neuquén, con temperaturas que durante el fin de semana superaron los 41 grados en ciudades como Roca y Neuquén capital, entre varias del norte de la Patagonia.

Según la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC), este lunes 9 de enero las máximas disminuirán levemente hasta los 38 o 39 grados, siendo este el quinto día consecutivo de temperaturas extremas pero, se estima, el último de este intenso período de calor.

Además, por estas horas la inestabilidad ronda las distintas zonas, por lo que al calor se suma la humedad que, si bien promete incipientes chaparrones, no alcanzará a convertirse en tormentas que signifiquen la disminución inmediata de las temperaturas al menos en las próximas horas.

Así es que recién este martes 10 se retomará algo de normalidad, con máximas que no superarán los 30 grados en los Valles, luego del ingreso de aire frío desde el Pacífico con algunas leves ráfagas de viento.

El ingreso de aire más frío en la zona cordillerana, con ráfagas del sudeste, significarán el comienzo de la disminución de las temperaturas extremas, mejorando las condiciones hacia el miércoles y trayendo el alivio a la agobiada región.