El delantero uruguayo anotó los tres goles del Xeneize, que tuvo ratos de buen fútbol y se repuso del tanto inicial de los cordobeses.

En un partidazo, Boca consiguió un triunfo clave frente a Belgrano en la Bombonera por 3-2: después de haberse ganado las críticas de los fanáticos xeneizes por su escaso aporte goleador, Edinson Cavani se despachó con un triplete que sirvió para dar vuelta el marcador y brindar tranquilidad. Con la victoria, el elenco azul y oro escaló hasta el quinto escalafón en el grupo B, a tan solo un punto de Racing, el último equipo en puestos de clasificación a la segunda ronda de la Copa de la Liga; el Pirata, por su parte, se hundió en el fondo de la tabla.

El local le imprimió ritmo al partido desde el inicio y contó con ocasiones claras para abrir el marcador: Luis Advíncula prevaleció sobre el sector derecho y, en el marco de una linda jugada colectiva, le cedió la pelota por ese costado a Jabes Saralegui. El joven mediocampista lanzó el centro atrás a los pies de Miguel Merentiel, que definió incómodo y por encima del travesaño. Al rato, el Pirata respondió con Esteban Rolón, que comandó una interesante acción individual que acabó en las manos de Chiquito Romero.

El lateral peruano, de lo más interesante del Xeneize durante los primeros 20 minutos, generó otro contraataque que Edinson Cavani no llegó a conectar. En el rebote, el propio Saralegui remató desde media distancia, pero el tiro a colocar se fue apenas desviado. Cuando todo parecía indicar que el anfitrión era superior, el elenco de Guillermo Farré sorprendió: luego de varios errores en la salida rival, la pelota le quedó a Lucas Passerini, que definió con prestancia al ángulo y selló el 1-0.

Con más fuerza que fútbol, el conjunto azul y oro empujó y mereció mejor suerte de cara al arco: el delantero charrúa tuvo una oportunidad inmejorable para igualar el pleito, pero Nahuel Losada contuvo su cabezazo de manera magistral con la cabeza. Nicolás Valentini también pudo haber empatado tras un envío aéreo, pero el balón rebotó y besó el poste. En medio de un clima tenso en la Bombonera, Boca se fue al vestuario con más dudas que certezas.

Más allá de que el Xeneize mostró cierta enjundia, el nerviosismo conspiró contra la generación de juego. De todas formas, le alcanzó con sus individualidades para hacer zozobrar al arquero del cuadro cordobés: Kevin Zenón ejecutó un zapatazo lejano sin tanta precisión y Cavani, una vez más, se encontró con un Losada inspirado. Aún así, una falta adentro del área le dio la revancha al exartillero del Valencia: Santiago Longo derribó a Cristian Medina y el uruguayo estampó el 1-1 desde los doce pasos.

A los 75′, Zenón rompió la presión de Belgrano y le cedió un pase perfecto a Lautaro Blanco, quien asistió con categoría al autor del primer tanto local: con toda la calidad que lo caracteriza, el atacante hundió el pie y dio vuelta el duelo con una exquisita emboquillada tras la aprobación del VAR. El show del goleador no terminó ahí, ya que tan solo cuatro minutos después capitalizó otra contra y festejó su primer hat-trick con la casaca del club boquense.

La salida del crack y la ovación de los hinchas hacía presagiar que el final del cotejo sería una fiesta, pero los de Farré tenían otros planes: un picante tiro libre de Matías Marín se coló sobre el ángulo derecho de Romero sin que Passerini llegue a desviar el centro. Boca resistió hasta el final casi sin sufrir y se quedó con más que tres puntos de cara al futuro. La 12 ya se sube al barco del Matador…