Uno de los primeros momentos emotivos se dio cuando la voz del estadio informó la formación de River. Cuando fue mencionado el nombre de Marcelo Gallardo, la gente gritó al unísono: “Muñeeeeco! Muñeeeeco!”. Tras ese grito y los aplausos también se escuchó: “Gallardo es de River, de River no se va”.

La cancha a esa altura ya estaba envuelta en lágrimas: nadie quiere ver partir al entrenador que más alegrías les dio.

El Monumental está repleto de banderas dedicadas al entrenador, que en la semana anuncio sorpresivamente que se aleja del Millonario.

Los jugadores también se muestran conmovidos: Enzo Pérez salió con lágrimas en sus ojos a disputar el partido frente a Central.

Los hinchas le dedicaron uno y otro canto y mensajes de agradecimientos.