A lo largo de la historia las condiciones de vida y los hábitos han afectado a las diferentes generaciones en diversos aspectos de la vida. Esto implica que el desarrollo de diversas problemáticas de salud es imposible de separar de cuestiones como el ambiente y la urbanización.

En el caso de la miopía y otras afecciones de la visión, como por ejemplo la presbicia, su desarrollo va de la mano de lo que ha ido pasando siglo tras siglo.

Para muestra sirve lo que ocurrió recientemente con la pandemia COVID 19, que disparó las consultas por molestias en la visión relacionadas con el incremento en el uso de dispositivos electrónicos que reemplazaron a los encuentros cara a cara.