Por estos días, muchas familias neuquinas notaron con preocupación la gran cantidad de contagios de niños y adolescentes, principalmente, con síntomas de una gripe. Esa situación tuvo su primera manifestación en la escuela y en las guardias médicas de esta ciudad, donde la demanda se reflejó en una gran lista de espera para evacuar la atención y recurrir una o más veces al centro asistencial.

En paralelo, Nación lanzó la alerta por un aumento de casos de gripe A. Pero en Neuquén, al menos, los indicadores de vigilancia que tiene el Ministerio de Salud no reflejan una situación de alarma.

Si bien se indicó que en las últimas semanas se observa un aumento de casos, estos no son por gripe A sino más bien por otras virosis respiratorias y cuadros de diarrea. «Hay un predominio de consultas pediátricas por bronquiolitis, asma, neumonía y diarrea, no de gripe A», sostuvo el biólogo y epidemiólogo Martín Lammel.

Tanto es así que en la última semana epidemiológica no se obtuvo ninguna determinación para gripe A. Recordó que la última ola que se registró en Neuquén fue a mediados de marzo. «La alerta es que hay un predominio de consultas pediátricas que tienen que ver con la estacionalidad de los virus», remarcó.

Agregó también que se observa un aumento de casos de diarrea, los cuales, si bien son «típicos de la época», son más que otros años. Esta situación coincide a su vez con un incremento en el número de cuadros de neumonía y otras virosis respiratorias.

En cualquier situación, sugirió a la población que recurra al lavado de manos, ventile los espacios y utilice barbijos si presenta síntomas. También que no asista al trabajo o a lugares donde pueda estar en contacto con otras personas.